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TOFANA DI ROZES (3225 m) - Vía Ferrata Giovanni Lipella


Tofana di Rozes, 3225 m - Vía Ferrata Giovanni Lipella (Gruppo Le Tofane) - Dolomiti d´Ampezzo.

Este célebre grupo montañoso se encuentra al norte de la carretera que comunica el Passo Falzarego con la populosa localidad de Cortina d´Ampezzo. Le Tofane forma uno de los macizos más marcados y famosos de Dolomitas, dividiéndose en tres partes: la cima Tofana di Rozes, Tofana di Mezzo y Tofana di Dentro. La Tofana di Mezzo con 3244 metros es la elevación máxima del grupo y un punto de vista fabuloso, a dicha cima se puede acceder fácilmente con el teleférico (Freccia nel Cielo - "Flecha en el Cielo") que parte desde Cortina d´Ampezzo y que lleva cerca de la cumbre. Los tres picos fueron conquistados por el gran alpinista y explorador austriaco Paul Grohmann junto con los guías de montaña locales entre 1863 y 1865.

  • Tofana di Mezzo (29 de agosto de 1863 - Paul Grohmann y Francesco Lacedelli).
  • Tofana di Rozes (29 de agosto de 1864 - Paul Grohmann, Santos Siorpaes y Angelo Dimai).
  • Tofana di Dentro (27 de agosto de 1865 - Paul Grohmann y Angelo Dimai).
La ingente masa rocosa que conforma la Tofana di Rozes, con sus 800 metros de altura en su cara sur, es una de las estructuras mas abrumadoras y hermosas, no tan solo de Dolomitas, sino de todo el marco alpino. La primera vía que se abrió en esta colosal pared fue en agosto de 1901 por las Baronesas Llona y Rolana Von Eötvös, acompañadas por los guías Angelo Dimai, Giovanni Siorpaes y Agostino Verzl.


La "Gran Guerra" en Le Tofane.

Le Tofane fue escenario de cruentos enfrentamientos armados entre las tropas italianas y las austrohúngaras durante la Primera Guerra Mundial. La ocupación de Cortina d´Ampezzo se llevó a cabo el 29 de mayo de 1915 por lo italianos sin problema alguno, ya que la localidad fue abandonada por los austohúngaros, replegándose a las montañas. El ejercito italiano comenzó a asediar estas posiciones sobre la vertiente oriental y meridional de Le Tofane, tomando en el mes de julio la Cima Bois; junto con la artillería comenzaron a bombardear la línea de defensa austriaca, dando inicio a un largo periodo de estancamiento, con continuos bombardeos y numerosos muertos y heridos en ambos lados. El teniente Dazio de Faveri con un comando de voluntarios logró controlar la parte superior de la Tofana di Rozes; sin embargo, entre esta última y la Cima Bois, los austriacos resistían tenazmente en el "Castelletto", un torreón rocoso situado al oeste de la Tofana di Rozes, dominando el camino que desde Cortina d´Ampezzo sube al Passo Falzarego. 


GALLERIE DEL CASTELLETTO

Los austriacos habían excavado en esta roca (Il Castelletto) varias galerías de las que sobresalían las bocas ametralladoras y cañones de tiro rápido, siendo inexpugnable a los asaltos de la infantería de montaña italiana - los legendarios Alpini -, ante esta problemática situación, el 19 de noviembre de 1915, el mando italiano tomó la decisión de hacer estallar Il Castelletto, haciendo construir un túnel cercano a esta posición, y que desde arriba permitiese hacer volar una potente mina sobre este torreón dolomítico totalmente inexpugnable. El 3 de enero de 1916 se empezó a trabajar en la excavación de la roca y en la construcción de los cuarteles para la tropa y oficiales del grupo de trabajo. El reconocimiento y la topografía continuó hasta finales de febrero, y se llevó a no menos de 50-150 metros de las posiciones del ejercito austrohúngaro, que entendiendo la amenaza hizo todo lo posible para frustrar esta obra, pero sin éxito. El 11 de julio de 1916 los italianos hicieron explotar una poderosa mina compuesta de 35 toneladas de explosivo, pulverizando Il Castelletto y permitiendo así su conquista, terminando este dramático episodio con cerca de 150 soldados austrohúngaros muertos.

INFOTOPÍA

Punto de partida
Accesible a través de una estrecha y empinada calzada que se toma en una curva de la SR-48, carretera que une el Passo Falzarego con Cortina d´Ampezzo.

Desnivel
1200 metros.

Distancia
10,5 kilómetros.

Tiempo 
7 a 8 horas, ida y vuelta.

Material  
Casco, guantes, kit de vía ferrata y linterna frontal para atravesar la Gallerie del Castelletto.

Grandiosa y larga vía ferrata en un entorno magnífico e irrepetible, una de las mejores de todo Dolomitas, donde podremos poner a prueba nuestra resistencia y capacidad a la hora de afrontar una actividad de esta envergadura, no considerándola apta para gente que se inicia en estos recorridos.
En Dolomitas es bastante frecuente la aparición de tormentas a mediodía o por la tarde (algunas de carácter fuerte), lo que puede originar un cambio brusco de tiempo e incrementar el riesgo de hipotermia. Debemos de tener en cuenta que si estamos realizando una vía ferrata no podremos retirarnos con la misma rapidez que en un sendero, y ser conscientes de que una sola chispa eléctrica que salte desde una nube de tormenta puede convertir toda una ferrata en una línea de alta tensión. Realizar cualquier actividad solo con condiciones meteorológicas favorables.

TOFANA DI ROZES (3225 m) - Vía Ferrata Giovanni Lipella.


Aproximación
Desde el refugio Angelo Dibona, tomar el sendero 404, que hacia el oeste pasa bajo la imponente cara sur de la Tofana di Rozes. Prácticamente recorrida esta vertiente, antes de llegar a la base de Il Castelletto, y en un giro a la derecha, se asciende para encontrar un muro equipado con grapas que conduce a la antigua posición de la Primera Guerra Mundial. Una escalera salva una pared vertical que lleva al comienzo de la Gallerie del Castelletto, cerca de 600 metros de túnel excavado en la roca y que se encuentra en total oscuridad, haciéndose del todo indispensable una linterna frontal para atravesarlo. El túnel comunica la vertiente sur de la montaña con la cara oeste. A la salida de éste, se baja por una empinada pared para alcanzar una larga cornisa, que en ligero descenso, lleva al muro inicial que da comienzo a la vía ferrata Giovanni Lipella, la cual podemos dividir en dos secciones.

Ferrata Lipella (1ª Sección)
El trazado inicial supera unos tramos verticales que llevan a una repisa, donde un corto tramo equipado conduce a una segunda terraza. A continuación una serie de pasos, siempre equipados, ayudan a ganar fácilmente una larga cornisa escénica con excelente visión del Lagazuoi y del Gruppo di Fanis, y donde se pierde algo de cota altimétrica, este tramo es bastante largo y ancho, con algún trecho más estrecho, pero sin dificultad reseñable. Al final de la cornisa se sube por un muro para llegar a una zona fácil. En líneas generales, se va ganando altitud, alternando pasajes verticales con repisas de longitud variable sin excesivas dificultades, encontrando algún paso esporádico más expuesto y sostenido. Una travesía ligeramente ascendente conduce cerca del estratégico punto de los Tre Dita (2700 m), donde en caso brusco de tiempo, fatiga acumulada o cualquier otra adversa circunstancia, permite escapar a través de esta antigua posición de guerra del ejército italiano por un sendero, que en aproximadamente 30 minutos, lleva al refugio Giussani.

Ferrata Lipella (2ª Sección)
Desde el punto de escape de los Tre Dita, se sigue a la derecha por la cornisa para dar con el primer tramo vertical. Unos cómodos escalones, llevan más adelante, a una estrecha repisa de la que parte un empinado cable metálico, alcanzando una zona donde la pared se vuelve más vertical y escarpada, conduciendo a uno de los tramos más espectaculares de la ferrata: una cuenca en forma de impresionante anfiteatro colgado en los abismos. Este panorámico pasaje se recorre en travesía hacia la derecha a través de una exigua repisa, para enfrentarse, a continuación, a unos diez metros verticales que alcanzan una detrítica cornisa que corta una pared a la derecha del anfiteatro (expuesto). La parte final del recorrido se desarrolla en terreno muy vertical, físicamente más sostenido y exigente, y donde la exposición es patente. La vía ferrata concluye en un sendero que transita por la cara oeste, y que conecta con la cresta, ancha y fácil, que en dirección sureste lleva a coronar la cima de la Tofana di Rozes. Advertir que esta segunda sección del recorrido requiere ir con más precaución, tanto por la exposición y dificultad como por los pasos más verticales y físicos, donde la altitud se deja notar, siendo posible encontrar, y dependiendo de la climatología, zonas bastante húmedas e incluso con nieve o hielo, haciendo particularmente arduo el ascenso.

Descenso
Desde la cumbre se baja por la cresta noroeste hasta encontrar el camino de la vía normal, que desciende en amplios zigzags y por gradas rocosas, atravesando el flanco norte de la montaña hasta la Fontananegra, donde se halla el refugio Giussani (2580 m). Desde aquí, seguir la señalización del sendero 403, dejando a un lado el antiguo refugio Cantore (inaugurado en 1921), continuando en descenso para alcanzar nuevamente el refugio Angelo Dibona, punto de partida de este recorrido.

FOTO ÁLBUM