ARRIEL, 2824 m - Arista Noreste (III+)

Arriel o Saldiecho (2824 m) por la cresta oriental.  Pyrénées - Atlantiques (France).

Ascensión poco habitual y de gran belleza que permite llegar a la cima de la vistosa pirámide del pico fronterizo de Arriel, realizando la vuelta al Circo de Arrémoulit. La subida por la arista NE, accidentada pero poco difícil, ofrece una escalada fácil en un ambiente magnífico de alta montaña. Por delante nos espera un día largo en soledad, moviéndonos entre la tierra y el cielo a la búsqueda de la cumbre de esta bonita montaña y en el centro del corazón de este soberbio paisaje. Uno de los recorridos más hermosos de este tipo que podemos recomendar en el Pirineo.

ACCESO

A través del Puerto del Portalet (Valle de Tena - Huesca) pasaremos a Francia para continuar con un largo y prolongado descenso por la D-934 a través del Vallée d´Ossau. Por la carretera atravesaremos varios túneles de protección contra las avalanchas. Tras pasar el cuarto túnel, con la numeración 1991, se llega a una curva muy pronunciada a la izquierda; aparcar por aquí, aprovechando los descampados que se encuentran a ambos margenes de la carretera (Caillou de Soques, 6 kilómetros desde la frontera).

INFOTOPÍA

Desnivel

1600 metros.

Distancia

17,5 kilómetros.

Tiempo

10 horas, ida y vuelta.

Material

Cuerda, casco, cintas exprés, algún katxarro (friends) y cintas o cordinos largos.

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Arriel por Arrémoulit y la cresta Oriental (III+).  Pyrénées - Atlantiques.

  Caillou de Soques (1400 m).

Desde la carretera, subimos hacia el noreste, dejando a la derecha la cabaña del Caillou de Soques, adosada a un enorme bloque de granito.

Alcanzamos el sendero del Parque Nacional, subiendo en zigzags por el bosque, para franquear el Arroyo de Arrious.

 El sendero sube hacia el este, pasando cerca de la cabaña pastoril de Arrious.

Tras recorrer todo este largo valle, llegamos al Col d´Arrious (2259 m).

Desde este punto tenemos dos posibilidades para llegar al refugio d´Arrémoulit. La primera, más segura y larga, consiste en bajar desde el collado al noreste, en dirección al Lac d´Artouste, girando seguidamente al SE hasta alcanzar el refugio. La segunda opción, más corta y desaconsejable con mal tiempo, es tomar al SE un sendero que lleva al Passage d´Orteig, un estrecho pasillo que corta unas verticales paredes dotado con cable de seguridad, pasado este contratiempo el terreno ya es fácil hasta dar con el refugio. Nosotros elegimos la segunda opción, girando a la derecha en el collado.

Llegamos en breve al precioso entorno donde se halla el Lac d´Arrious (2285 m).

Dejamos el lago a nuestra derecha, subiendo a un collado sobre la cresta NO del Pico del Lago de Arrious, en dirección al Paso de Orteig.

Paso de Orteig 

Este sendero socavado en la roca acorta considerablemente el camino para llegar al refugio de Arrémoulit sin descender al Lac d´Artouste. Con terreno húmedo habrá que extremar las precauciones ante lo vertiginoso del paso.

A nuestra izquierda, en el fondo del valle, vemos el Lac d´Artouste y el camino alternativo, y también menos expuesto hacia Arrémoulit.

Tras el Paso de Orteig, el sendero discurre por una zona de caos granítico (hitos).

Alcanzamos una loma (2360 m), desde donde se divisa el refugio.

Nuestra posición nos permite admirar la pesada masa del colosal Palas.

Bajamos la loma en dirección al refugio.

Refuge d´Arrémoulit  (2265 m).
Tomamos un respiro y aprovechamos para coger agua de la fuente que se encuentra en la parte posterior del refugio.

El paisaje es sobresaliente. Desde aquí es visible la brecha, que en teoría, da acceso a la arista NE, a la cual tenemos que llegar.

Nuestra próxima meta es el Col d´Arrémoulit. Salimos hacia el este, dejando el lago a nuestra derecha.

Más arriba, dejamos el camino que se dirige al Col du Palas, para dirigirnos al sureste.

Progresamos por un canchal que nos acerca al puerto fronterizo del Col d´Arrémoulit (2448 m). 

  Giramos hacia la derecha antes de llegar al Col d´Arrémoulit.

No existe senda alguna. Echando mano de nuestra intuición, contorneamos la cara norte del Pic d´Arrémoulit por un terreno bastante dificultoso y puñetero.

A nuestra espalda vemos de nuevo el Palas, ascensión que realizamos hace ya algún tiempo por la Arista de los Geodésicos.

Atravesamos un nevero bastante helado muy cerca de la brecha d´Arrémoulit.

Alcanzamos la brecha, y desde ella no encontramos un paso factible que nos depositara en el filo de la arista. Nos decantamos por escalar un diedro que se halla más a la derecha (intento fallido), y viendo que la cosa se ponía seria, tuvimos que destrepar y buscarnos la vida por otro lado. Además, para ahorrar peso, solo llevábamos una triste cuerda de 30 metros y no estábamos para andar metiéndonos en "fregaos". La línea verde de la foto inferior indica la opción que al final tomamos para alcanzar la cresta (expuesto).

Transitamos por una vira que atraviesa la pared, escalando a continuación un espolón que se eleva verticalmente hasta la cresta (roca delicada, III+), donde todo lo que agarrábamos se rompía peligrosamente, convirtiéndose ipso facto en fosfatina. Sin duda esta es la parte más expuesta del recorrido.

Después de un rato de tensión y quemando adrenalina, nos encaramos a la cresta.

Desde la cresta se abre un grandioso escenario hacia el macizo del Balaitous y los Lagos de Arriel.

Ahora avanzamos sobre el filo, animados por una roca más noble y segura que la anterior.

La fantástica masa del Balaitous abarca en gran parte este majestuoso paisaje. A mi memoria vienen los recuerdos de la ascensión que realizamos por la Brecha Latour a este gigante del Pirineo.

Avanzamos en dirección al Arriel Oriental. Nosotros lo atacamos por su cara norte (línea amarilla de la foto inferior). Expuesto, ningún paso excede el IVº.

ARRIEL ORIENTAL  (2697 m).

 Alcanzamos esta cota que coge de camino a la pirámide terminal del Arriel, que destaca cercano, al fondo.

Desde el Arriel Oriental, perdemos algunos metros hacia la brecha que nos separa de la cima principal, con la tétrica y sombría cara norte a nuestra derecha.

Llegados a la brecha, comenzamos a elevamos de nuevo por la línea fronteriza.

 Progresamos una veces por territorio francés, otras por el lado español.

Traspasada otra brecha, después de un delicado flanqueo por la cara norte, la parte final nos lleva sin mayor dificultad que la de caminar hasta la cima.

ARRIEL (2824 m). 

Las cosas que más nos llenan y cautivan se hallan aquí arriba, no necesitamos más para ser felices, en la cima de esta montaña nuestros sentimientos se unen para descubrir lo que somos.

Podemos observar el bello paisaje de los lagos a nuestros pies.

Tras un buen rato de contemplación, nos ponemos en marcha hacia abajo, siguiendo la accidentada cresta hacia el noroeste.

Más abajo, hacemos un descenso pronunciado por un canchal que nos deja en el Collado de Arriel (2608 m), desde aquí cambiamos de dirección (oeste) en busca del Col de Sobe.

Bajamos por territorio español, acercándonos al Col de Sobe, separándonos del camino que viene desde el Valle de Aguas Limpias y que sube al Arriel desde el Embalse de La Sarra.

Col de Sobe (2449 m).
Collado fronterizo.

Desde el Col de Sobe, emprendemos decididamente un rápido descenso por tierras francesas. Mucho más adelante y más abajo, enlazamos con el camino que utilizamos esta mañana de subida al Col d´Arrious, girando hacia el oeste llegaremos a nuestro punto de partida en el Caillou de Soques.

Son los últimos rayos solares que preceden al crepúsculo. Caminamos en sepulcral silencio, muy pronto las sombras bañarán pesadamente los verdes valles, dejando el camino sembrado a la noche. Inconscientemente, en nuestra memoria, el día que hoy se despide alimentará nuestros futuros sueños.

"Para hacer soportable la realidad, todos nos vemos obligados a mantener en nosotros algunas pequeñas locuras".
MARCEL PROUST

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